Badajoz, 30.07.2015. El portavoz socialista considera que se tiene que poner en marcha un Plan de Impulso de al menos cinco millones de euros. Cabezas afirma que el PP no puede presumir de un holgado remanente de Tesorería y superávit y reducir al mínimo inversiones muy necesarias para el mantenimiento de la ciudad.

Ricardo Cabezas, portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Badajoz, señala que “es evidente que las cuentas no le salen al equipo de gobierno del PP. A estas alturas del año estudian si hay o no Plan de Impulso que privará a pequeñas empresas y negocios de suministrar al ayuntamiento sus servicios por lo que reciben más de 10 millones de euros antes de terminar el año. Un duro ajuste del cinturón. Pero es que es mucho peor: con 47 millones de remante, y 23 millones de superávit, según dicen, es inexplicable que no se pueda gastar nada siendo además necesario. Esto lo tienen que explicar muy clarito, pues lo que demuestra es que estamos a nivel económico con la soga al cuello en el ayuntamiento. O que demuestren los concejales del PP lo contrario”.

El portavoz socialista considera que no hay voluntad para sacar adelante el Plan de Impulso de este año, sufragado con remanente de tesorería, a pesar de las restricciones del Ministerio de Hacienda tras presentar el Consistorio el obligado Plan Económico Financiero por haber gastado por encima de nuestras posibilidades en anteriores anualidades. A su juicio, es del todo incompatible presumir de arcas municipales muy saneadas y no poder dedicar nada a inversiones que son preferentemente de mantenimiento de la ciudad, servicios básicos, y mejora de la red de saneamiento. Para Cabezas, como mínimo, debieran dedicarse unos cinco millones de euros a un pequeño Plan de Impulso que permita a la ciudad solucionar necesidades prioritarias y por otra parte beneficiar a los empresarios de la ciudad, pues siempre el PP ha dicho que este plan había venido sirviendo en los últimos años para que algunas empresas no cerrarán y para el mantenimiento de puestos de trabajo, capeando mejor la crisis.

Cabezas espera que el alcalde, con la ayuda de los técnicos, salga de la indefinición cuanto antes y se pronuncie en positivo al respecto de estas inversiones tan necesarias que espera las anuncie cuanto antes. Si no fuera así, 2015 sería uno de los años con menor inversión municipal de toda la década, pues a la inexistencia del Plan de Impulso se añade un anexo de inversiones fallido al haber prorrogado los presupuestos y no contemplarse.