El portavoz socialista y candidato a la Alcaldía considera que hay que cortar tanta inoperancia y precariedad.

A los músicos que actúan no se les ofrece ni agua. En una actuación en La Galera, personas mayores tuvieron que orinar detrás de unos jardines, en la oscuridad.

“La Ciudad Encendida” tiene zonas de sombra que la hacen dar fogonazos y chisporroteos que debieran corregirse. La producción de ese ciclo es deficiente e irrespetuosa con público y artistas. Para Ricardo Cabezas se trata de “una gestión lamentable de la cultura, en este caso con responsabilidad desde la Concejalía de Turismo y Patrimonio Histórico, que también es una forma de medir el amor por nuestra ciudad y el compromiso con ella. Así, tan en precario, de manera tan improvisada y poco profesional no se puede desarrollar un programa de actividades culturales y de ocio”.

MÁS APRECIO Y RESPETO A ARTISTAS LOCALES. A Cabezas le preocupa la falta de consideración hacia los artistas locales, gente de una alta calidad profesional y personal, que son profetas en su tierra, pero no ante su ayuntamiento. Cree que esto se puede solucionar prestando un apoyo implícito y cuidando los detalles, de esta manera estos artistas, músicos, actores, actrices, se sentirán respaldados. Este programa realizado en septiembre y octubre, con 40 actividades (artes escénicas, música, arte, deporte, cultura…) y 70.000 euros de presupuesto, necesita una producción acorde al proyecto. Es incoherente volcarse en La Noche en Blanco y al día siguiente desentenderse en La Ciudad Encendida, bajando el listón a ras de suelo. “Pero tiene menos sentido dejar a la intemperie a nuestros artistas (y al público) pues resulta descorazonador. No pueden repetirse estas incidencias nunca más y les ruego tomen buena nota de la profesionalidad que se requiere para tratar con profesionales del espectáculo”, advierte Cabezas.

LISTADO DE ERRORES QUE ENCIENDEN AL RESPETABLE. Las equivocaciones más comunes de “La Ciudad Encendida” pasan por encontrarse cerrados los emplazamientos para las actuaciones (y tener que romper candados o cuadros de luz), una sonoridad nefasta, no hay presupuesto para agua y menos para un catering básico, no hay interlocutor ante posibles incidencias y responden al teléfono días después, o en el momento de la prueba de ensayo no tener todavía punto de luz, o cuando se suspende una actuación que nadie informa al artista de qué va a pasar con su función, entre otras anomalías, dejadez y arbitrariedades. Por no hablar de una clara falta de respeto al público, con ausencia de urinarios (que por ejemplo en La Galera obligó a personas mayores a ocultarse tras unas plantas para orinar) o falta de asientos para espectadores, pues pareciera que no confían en el éxito de asistentes de lo que programan y afortunadamente no es así y los artistas locales tienen un fuerte respaldo del público.

Foto portada: Diario Hoy (2019).

Foto secundaria: Web Concejalía de Turismo del Ayuntamiento de Badajoz. https://turismo.aytobadajoz.es/ciudad-encendida/