La destrucción parcial del muro en la avenida Joaquín Costa evidencia que las vistas no son las mejores y por eso reclaman los socialistas que la obra incorpore intervenir en la fachada del edificio de la Escuela Oficial de Idiomas y en espacios adyacentes para dar una mejor imagen.

El grupo socialista quiere que una vez derribada la parte superior del murete la obra no se detenga, pero que si se va a retomar tiempo después que se una intervención única y definitiva.

Cuando las máquinas entraron en la parte trasera del palacio de Godoy hace una semana, esta obra llevaba tres meses parada, tal y como denunció el portavoz socialista, Ricardo Cabezas, el pasado 10 de enero, pues la empresa  adjudicataria de los derribos, Atención y Calidad del Sur S.L. (por 51.751,7 euros), dejó de trabajar en  el puente de la Constitución. Primero, por la aparición nada sobrevenida de amianto y, después, por un mayor coste de los materiales. El caso es que desde que se anunció en diciembre de 2019 la adecuación del entorno del palacio de Godoy todo han sido retrasos, incluso la actual demolición del muro prevista para el pasado verano. Ahora se ha actuado para poder resolver el contrato con la empresa adjudicataria pues este trabajo estaba incluido en el coste previsto y no requería modificaciones.

QUE NO PARE LA OBRA. Cabezas teme que la vuelta de trabajadores al entorno del caserón de Godoy será puntual y que habrá que seguir esperando para que continúen las obras previstas: rematar los derribos, crear una plazoleta que comunique con la calle Porrina de Badajoz y un pequeño aparcamiento en superficie. El proyecto para avanzar con la adecuación del entorno no está listo a pesar de todo el tiempo transcurrido (su coste rondará los 600.000 euros), y pasarán meses hasta que se consiga revertir la imagen actual de este enclave tras la retirada de la tapia. El portavoz socialista echa en falta una mínima planificación de los tiempos y de coordinación con la Junta de Extremadura. Además de incluir el fin de los derribos, proponen incorporar en el proyecto todos aquellos elementos no contemplados y que afean este espacio abierto. Desde la fachada del palacio, a la retirada de aparatos de aire acondicionado, pintado de estructuras metálicas, conducciones de agua y cableado visible. Y hay dos caminos: o lo hace directamente el ayuntamiento y le pasa el cargo que corresponda a la Junta de Extremadura o bien la Consejería de Educación y Empleo articula el adecentamiento del edificio que gestiona. La intención es que, cuando se recupere este espacio para el disfrute público, se haga sin intervenciones posteriores. Y,  ya que tras tirar el muro los trabajos sufrirán un parón, al menos que la próxima acción de mejora sea única y definitiva.

Fotos: PSOE