Badajoz, 17.10.2016. El Grupo Socialista quiere priorizar esta medida y evitar así que los viajeros vayan como sardinas en lata. La aglomeración de viajeros se produce a primera hora de la mañana y al mediodía. El PSOE pide analizar bien todos los cambios previstos por Tubasa de tal forma que jamás se incrementen los costes.

Diariamente la Línea 18 del bus urbano de Badajoz (Cerro Gordo – San Roque – Hospital Clínico – Universidad – El Faro) presenta en horas punta (a saber, a primera hora y a mediodía, sobre todo) una aglomeración de personal en los viajes que realiza que está causando malestar y preocupación en los usuarios. Muchos de ellos se preguntan por la seguridad en esta situación al sobrepasarse las plazas asignadas o ante cualquier otra incidencia que pudiera producirse. En algunos casos, el autobús no para por ir al completo, según han trasladado diferentes viajeros al Grupo Socialista. Reforzar la Línea 18 es una necesidad imperiosa y debe ser una de las prioridades.

Hay que recordar que la Línea 18 es la que cuenta con más viajeros en toda la ciudad con 866.355 usuarios en 2015, siendo el trayecto más rentable de todos los que cuenta Badajoz. Otra queja que han trasladado al PSOE es que el inicio de la línea desde Cerro Gordo no es precisamente puntual en domingos y festivos, algo que se deberá corregir.

El PSOE espera que los nuevos cambios propuestos por Tubasa cuenten con un estudio riguroso y se prime el ahorro optimizando el servicio ofrecido hasta ahora. Es evidente que hay que procurar que cada año se sumen más viajeros a este servicio privatizado y recuperar el bajón de 2015, donde casi 84.000 usuarios dejaron de coger el bus con respecto al año anterior. Una bajada en viajeros que minimizó los resultados del can-bus para abaratar los costes mediante eficiencia energética no siendo significativa la reducción del déficit, y todo a pesar de que la subvención del Estado para incentivar el uso del autobús ha aumentado en 2015 en 109.621 euros hasta los 463.633 euros. El Grupo Socialista tiene claro que el equilibrio financiero con la concesionaria no puede aumentar. En 2015 ese déficit, tras pagar sus billetes los viajeros, fue de 4.251.184 euros.